¿Pierde peso tu gato anciano, aunque coma? Te contamos lo que debes saber
Aquí te explicamos cómo actuar si tu gato anciano pierde peso, aunque coma.
¿Has notado que tu gato anciano está perdiendo peso y te preocupa su salud? Por desgracia, la pérdida de peso puede ser habitual entre nuestros amigos los gatos que ahora tienen el pelaje "canoso", pero es una señal que conviene no pasar por alto porque a veces indica la presencia de enfermedades incluso graves.
En este artículo veremos cuáles pueden ser las causas de que tu gato pierda peso, te explicaremos por qué es fundamental que tu gatito mantenga siempre un peso correcto y te daremos algunos consejos sobre cómo actuar en estos casos.
¿Cuáles pueden ser las causas de la pérdida de peso en el gato anciano?
Como hemos dicho, la pérdida de peso en el gato anciano es una enfermedad bastante común y habitual.
En general, puede decirse que los pequeños cambios de peso son bastante normales con la edad.
Sin embargo, en el caso de cambios bruscos y rápidos, es importante intentar determinar si hay alguna enfermedad detrás que provoque estos cambios.
Los estudios publicados en el Journal of Feline Medicine & Surgery en 2016 [1], de hecho, destacaron observaciones importantes que hay que tener en cuenta.
Estas investigaciones descubrieron que, en el gato anciano, una pérdida de peso corporal de 100 g puede aumentar el riesgo de muerte en un 6,4 %.
Además, si hablamos de masa muscular (es decir, toda la parte del cuerpo sin grasa y, por tanto, la parte formada por masa proteica, glucógeno, agua, minerales y grasa primaria) por una pérdida de 100 g el riesgo de muerte puede aumentar un 20 %.
Sin embargo, si hablamos de masa grasa (es decir, la cantidad total de lípidos en el cuerpo), estos mismos estudios han demostrado que por cada 100 g de pérdida de grasa corporal, el riesgo de muerte aumenta un 40 %.
Esto confirma la importancia de las revisiones periódicas del veterinario porque el médico puede evaluar la salud de tu gato y determinar su estado corporal con instrumentos apropiados y específicos. Así, en caso de anomalías, podrán realizarse los análisis necesarios.
¿Qué es la sarcopenia geriátrica?
La sarcopenia es una enfermedad que puede afectar a nuestro gatito cuando su pelaje empieza a ser bastante gris.
Esta situación está marcada por la pérdida de masa muscular y, por lo tanto, de fuerza muscular debido al inevitable envejecimiento del cuerpo y del organismo.
La sarcopenia es común en todos los gatos ancianos y se produce tanto si no tienen ninguna enfermedad como si tienen algunas enfermedades crónicas.
La pérdida de masa muscular no solo da lugar a la reducción de la fuerza de nuestro amigo de cuatro patas, sino también a una disminución de las defensas del cuerpo y de la capacidad de recuperación después de una enfermedad, lesión u operación.
Esto significa que el gatito puede ponerse enfermo con más facilidad y está más débil.
Como seguramente te imaginarás, es imposible evitar la sarcopenia, porque es una consecuencia directa de hacerte mayor. Pero lo que sí se puede hacer es retrasar la pérdida de masa muscular manteniéndola constante y controlada igual que el peso corporal.
Muchos estudios han demostrado que una dieta más rica en proteínas ayuda a frenar la disminución de la masa corporal muscular y, por lo tanto, es una excelente ayuda para la salud y la vida del gatito.
Sin embargo, por muchas proteínas que contenga un alimento, siempre es fundamental que sean de excelente calidad y de origen animal.
Sobre este tema, te sugerimos que leas nuestra guía sobre la alimentación adecuada del gato anciano.
¿Por qué pierde peso el gato anciano?
Además de la sarcopenia, existen otras causas que hacen que el gato anciano pierda peso.
En general, la pérdida de peso del gato se debe a una pérdida de apetito por una reducción del sentido del gusto o del olfato. Con la edad, el gatito puede perder interés por la comida.
Si, por el contrario, el gato pierde peso, aunque coma, las causas pueden ser muy distintas. Veámoslas a continuación en una lista rápida y sencilla:
- Enfermedades del aparato digestivo. Estas enfermedades pueden deberse a bacterias, virus o parásitos y provocan vómitos y diarrea en el gatito. Como consecuencia, el gato pierde peso debido a la mala absorción de las sustancias nutritivas de los alimentos que come.
- Intolerancias alimentarias. Si el gato es alérgico o no tolera un alimento, puede sufrir trastornos intestinales. Los alimentos que el organismo no atrapa bien provocan una pérdida de peso.
- Aumento de la tiroides. Se trata de un trastorno de la tiroides muy común entre los gatos adultos y ancianos. En general, esta enfermedad va acompañada de un aumento del apetito y de una pérdida de peso aparentemente sin explicación. El aumento de la tiroides suele aparecer en gatos mayores de 10 años.
- Problemas de los riñones. Los síntomas de los problemas de los riñones son vómitos, diarrea, aumento de la sed, falta de interés, deshidratación y pérdida de peso. Estos problemas son frecuentes en gatos mayores de 10 años.
- Diabetes mellitus. Esta enfermedad, que puede ser hereditaria, se caracteriza porque el cuerpo tiene problemas para utilizar el azúcar como energía. Como el cuerpo libera demasiada insulina, el azúcar no puede ser absorbido por los órganos y queda en la sangre. Entonces, el cuerpo usa grasas y proteínas como energía en su lugar. En general, la diabetes está relacionada con el aumento de peso y la obesidad, pero en algunos casos puede causar una pérdida importante de peso.
- Problemas respiratorios. Estos problemas pueden alterar el olfato del gatito y hacerle perder el interés por la comida.
- El estrés. La angustia y el estrés también pueden hacer que un gato pierda peso y es importante tenerlo en cuenta para ver si algún cambio puede haber afectado al gato doméstico.
Qué hacer si tu gato pierde peso
Ahora que ya tienes una idea más clara de las causas que pueden llevar a tu gato a perder peso, nos gustaría darte algunos consejos rápidos y sencillos sobre cómo tratar estos casos.
En primer lugar, como hemos visto, es muy importante que intentes mantener el peso corporal y la masa muscular del gatito.
La dieta correcta y equilibrada siempre te ayudará.
Elige alimentos ricos en proteínas de gran calidad, con vitaminas y antioxidantes para reforzar el sistema de defensas del cuerpo, bajos en fósforo para favorecer la salud de los riñones y con la cantidad adecuada de fibra para garantizar una barriguita sana.
Recuerda siempre la importancia de los líquidos en la dieta de tu gatito: anímale a beber agua fresca y limpia y no olvides la importancia de la comida húmeda para complementar la cantidad correcta de líquidos incluso en aquellos gatos que no les gusta mucho el agua.
Además, la actividad física diaria favorece el mantenimiento de la masa muscular. Te aconsejamos que estimules a tu gato y juegues con él todos los días: ambos os divertiréis y haréis un gran bien a su salud.
Por último, como hemos mencionado más arriba, es importante programar visitas y análisis periódicos con el veterinario para mantener la salud de tu gatito bajo control en todo momento e intervenir a tiempo si es necesario.
Si tu gato anciano pierde peso, esperamos que en este artículo hayas encontrado consejos útiles sobre cómo intervenir rápidamente y ayudar a tu gatito a recuperar su peso corporal ideal.